¿En qué consiste la legalización de ingeniería?
La legalización de la ingeniería de una empresa resulta clave para que sus actividades se pueden realizar sin riesgos para los trabajadores ni el entorno en el que está ubicada. El funcionamiento de algunos de estos proyectos depende de instalaciones térmicas y eléctricas de dimensiones medias y grandes, las cuales requieren, para no generar peligros, un exhaustivo análisis de seguridad previo a su puesta en marcha. A continuación, un repaso de las claves de estos trabajos.
¿Qué es la legalización de ingeniería y por qué es tan necesaria?
En primer lugar, hay que señalar que se trata de un requisito imprescindible para que determinados proyectos empresariales puedan comenzar su andadura. Las obras que materializan las actividades industriales incluyen la erección de instalaciones para albergar potentes maquinarias. Estas instalaciones deben ser aprobadas con base en su cumplimiento de las regulaciones legales imperantes.
En este sentido, han de redactarse proyectos técnicos cuyo fin es cumplir con normativas como el Reglamento de Instalaciones Térmicas de los Edificios (RITE) y el Reglamento Electrotécnico de Baja Tensión (REBT). En función de las potencias y los tipos de instalaciones necesarias, habrá que aportar unas memorias que garanticen criterios como la calidad y la seguridad de las instalaciones.
Asimismo, determinados edificios que utiliza o alquila una empresa deben acreditar que cumplen los actuales criterios de eficiencia energética. Por consiguiente, requerirán el certificado pertinente para que se demuestre que en su funcionamiento se respetan las normativas vigentes en materia de sostenibilidad.
¿Por qué es mejor recurrir a una empresa especializada en regulaciones legales para resolverla?
Por lo general, una empresa que se vuelca en un sector concreto de la actividad no cuenta en su plantilla con expertos en legalizar la ingeniería de sus propias instalaciones. Este trabajo han de realizarlo determinados profesionales como los técnicos titulados y los instaladores autorizados.
Implementar un departamento solo para esta función no resulta, en este contexto, rentable. Por consiguiente, vale la pena delegarla en una empresa que cuente con una plantilla multidisciplinar con experiencia en este tipo de trabajos.
De este modo, se evita incurrir en fallos que incrementarían el coste de la operación y se optimiza el tiempo que se dedica al negocio. Se externaliza el cumplimiento de estos requisitos técnicos en personal cualificado, lo que comporta que el empresario y sus trabajadores puedan ocuparse de los asuntos centrales de su actividad laboral.
Finalmente, cabe señalar que un consejo idóneo para optimizar la legalización de las instalaciones térmicas y eléctricas pasa por confiar en un proveedor como nosotros, ya que tenemos amplia experiencia en esta clase de trámites y contamos con profesionales cualificados correctamente. Nuestro equipo se encarga de las legalizaciones de las instalaciones y también de las auditorías de los proyectos para comprobar que están funcionando con los estándares requeridos.
La legalización de la ingeniería de una empresa resulta indispensable para su funcionamiento seguro y productivo. Conviene dejar en buenas manos la certificación de las instalaciones empresariales. ¡Síguenos en redes sociales, conoce nuestros servicios y contacta con nosotros!